Primera convocatoria

21 Agosto 2008

A raíz de la convocatoria realizada por Micaela Ospina a través de la base de datos de AMCA , se propone una reunión en la embajada de Colombia en Buenos Aires a todos aquellos que quieran participar del grupo sin requisitos de formación en danzas.

29 agosto 2008

En dicha reunión a la cual asisten menos de 5 personas además de las socias de AMCA , hablamos acerca de nuestra motivación , establecemos un dia y un lugar para reunirnos , las socias de AMCA les cuentan a las asistentes de la existencia de un grupo anterior : su alcance , los trajes que quedaron y el motivo de su disolución.

29 agosto 2008

El sábado siguiente a pesar de las inclemencias del tiempo, nos reunimos en casa de María Clara Rubiano, quien amablemente ofreció su hábitat como locación temporal, mientras decidimos donde vamos a operar definitivamente. En esta ocasión la reunión estuvo más nutrida pues asistieron entre 12 o 15 personas y floreció una esperanza de que este grupo empezaría a funcionar.
Durante la tertulia que llevamos a cabo, en esa fría y lluviosa tarde, acompañados de una tacita de café colombiano, que María Clara nos brindo, los presentes nos identificamos uno a uno presentándonos ante el resto de participantes del grupo; paralelamente, esbozamos los sentimientos y motivaciones de cada quien tenía para desarrollar esta actividad que además de cultural es placentera y lúdica.

Detectamos, con la ayuda de EBERT( un coreógrafo ya reconocido por sus múltiples trabajos y puestas en escena aquí en la ciudad), la debilidad de nuestra falta de homogeneidad en el grupo que tiene pocos hombres, muchas mujeres, de disimiles edades y con diferentes experiencias anteriores en el ejercicio de la danza.

El propuso que en un principio, la prioridad seria emparejar el grupo, ya que hay algunos con mucha más experiencia que otros. El argumenta que en caso que se compromete a dirigir este grupo, querrá obtener resultados propios de profesionales.

También, PATRICIA, la directora de comunicaciones de AMCA, nos puso en conocimiento de que trataba este proyecto y prometió enviar copias del mismo a nuestros correos electrónicos, para que sigamos muy de cerca el objetivo fundamental de AMCA en esta propuesta, que sería patrocinada inicialmente, la misma Asociación y la Embajada de Colombia en Buenos Aires y que tendría como objetivo principal, mostrar nuestra expresión cultural en los eventos de la misma.

Una sutil promesa se siente florecer en el espíritu de cada uno de nosotros y nos hace sentir esperanzados de poder conseguir que nuestro anhelado proyecto fructifique, pues contaríamos con el apoyo de profesionales de la coreografía que prometieron apoyarnos en la guía y desempeño de nuestro objetivo.
Aquellos que asistimos, salimos de allí con la deliciosa sensación que tenemos los colombianos cuando encontramos a un compatriota – o varios de ellos – que estamos compartiendo los mismos objetivos, la misma deliciosa y refrescante cultura, el dulce sabor de la concertación y la solidaridad con la causa. Se nos ha consolidado la certeza de que sería posible representar a nuestra bella patria de forma honorable, e ir poco a poco ir lavando esa cara que se ha manchado con las múltiples circunstancias que todos conocemos.

En esta reunión también se propuso que la próxima se realizaría en casa de SANDRA, quien vive en Acasusso y ha ofrecido gentilmente un salón de la misma, mientras afianzamos más el grupo.